En mi segundo fin de semana, en vez de salir de juerga,
decidí hacer un poco de turisteo por los alrededores de Chengdu. En esta
entrada hablaré de mi mini-viaje a Leshan, un pueblo de cerca de Chengdu, a
hora y media en bus.
A las 9 de la mañana me presenté en la estación de autobús Xinnanmen
(un pelín al sur del centro de la ciudad), solo, y con muchas ganas de coger un
bus en china (cada cosa que hacía era una experiencia!). En la entrada de la
estación hay un panel muy grande con todos los destinos a los que se puede
llegar con los autobuses, y ahí estaba el mío, Leshan, o más concretamente, el
Buda Gigante de Leshan. Tras esperar unos 10 minutos de cola, conseguí mi
ticket, luego pasé por los detectores – seguridad ante todo!- esperé otra cola
para entrar en el bus, y me monté. Primera impresión: un autobús normal, ni muy
viejo ni muy nuevo, aire acondicionado, televisión a bordo, vamos, bastante
bien.
El camino a Leshan fue muy cómodo, paisaje muy muy verde y
pueblos chiquitillos por el caminio. En la tele del bus pusieron un
megadocumental de hora y pico sobre una cantante muy famosa, ya fallecida,
china - Deng Lijun(邓丽君) – que debe
ser como una Lola flores en España, pero de musica pop. Para los que aprendáis chino, una amiga me
dijo que la tipa Deng Lijun tiene canciones muy fáciles de entender, y que esta
genial escucharla para aprender.
A la llegada a Leshan, nada más bajar del bus había un
hombre que nos invitaba a montarnos en otro autobús local para ir a ver el Buda
Gigante. En este punto, para los posibles visitantes a Leshan, es conveniente
saber lo siguiente: El buda puedes verlo de dos formas: subir la montaña
andando y aguantar las colas que se forman por las escalinatas, o coger un
barquito que va por el río y se detiene un rato en frente de la estatua, donde
puedes sacar las fotos que quieras. La primera opción, si no hace mucho calor,
y estás dispuesto a rozarte con muchos chinos
mientras subes incontables escaleras, que se saquen fotos contigo, etc. esta
bien. Y podrás sacar fotos muy chulas, además de poder ver de cerca todo el “complejo”,
y al propio Buda. La segunda opción es mucho más cómoda, pero digamos que es más
de “turistas japoneses”. Alguien en Chengdu me explicó este término de “turistas
japoneses”, que son los turistas que llegan, sacan la foto, y se van. Cada uno
que elija lo que le venga mejor, yo fui en el barco porque hacía muchísimo
calor, y me dolía mucho el pie. Pero unos amigos fueron por la montaña, y
vieron muchas cosas que yo no pude ver. Eso si, si tuviesen que repetir irían
en el barco sin dudarlo. Y si tienes mucho tiempo, y te da igual gastarte el
dinero (creo que hacer las dos cosas te sale por unos 15 euros, y cada uno por
separado unos 7-8 euros), pues adelante!
Volviendo al autobús: yo me monté en el autobús local (muy
muy cochambroso), que por 1 yuan te lleva hasta la zona de la ciudad donde está
el Buda. Como no entendía ni papa de lo que decía nadie, ese bus me llevó hasta
la Opción A
(la de subir la montaña), y cuando por fin entendí que desde allí se tenía que
ir por la montaña, busqué un taxi que por 5 yuan (50 cents) me llevó a la
entrada para coger el barquito. No tengo ni idea de cómo llegar directamente a
esa entrada nada más bajar del autobús de Chengdu… Al lado de la entrada hay
muchos puestecillos de recuerdos, y recomiendo comprarse las pulseras de bolas
de madera con una mini-tablilla con 3 caracteres. No se que pone, pero me
comentaron que era lo típico que se compraba en Leshan. Y no paguéis más de 6
yuan! (regatear, os dirán que cuestan 10). Ah, y ya me contaréis si también os
hacian oler las pulseras para que comprobéis que son de madera de verdad, jeje.
Al lado de la entrada conocí a una pareja de españoles super
majos, y fuimos los 3 en el mismo barco. Sacamos un montón de fotos, echad un
vistazo a estas pocas:
Después pillamos un taxi, que nos llevó de vuelta a la
estación de autobús, y cerca de allí comimos antes de montarnos. Rico rico, como
siempre en China! Compramos los billetes de vuelta (creo que no se pueden
comprar billetes de ida-y-vuelta desde Chengdu, hay que comprarlos por separado
en cada estación), y yo me fui a Chengdu; ellos a la montaña Emei-Shan, a otra
hora y pico de Leshan.
Recomendación: Id a ver el Buda, merece muchísimo la pena y
es impresionante, te hace pensar como leches habrán escarbado la montaña para
hacer el Buda. Y en mi opinión les quedó hasta guapo el chaval! Aproximadamente
una uña del pie del buda es del tamaño de una persona… flipante!
PD: y hablando de Buda, os recomiendo ver una película china,
ganadora del premio de cine de Casa Asia de este año, ambientada en Chengdu
tras el terremoto de 2008, “Buddha Mountain”. Es muy “china”, pero me encantó.