lunes, 12 de septiembre de 2011

The very best - Montaña Qing Cheng

Hola peñita!

Ya ha pasado más de un mes desde que volví... buff que malo es trabajar! Pero me he guardado esta entrada para el final, porque sinceramente fue yo creo que lo mejor que hice en China: por el sitio, el cambio de escenario, y sobre todo por la compañía.

Mi profe-amiga Beibei me preguntó el tercer día de clase si me apetecería ir con ella y con su amiga a ver una montaña muy bonita cerca de Chengdu. Yo pensé que se trataba de Emei Shan, que es superconocida y muy turística - aunque yo no fui a verla... . Bueno, pues no, se trataba de la QingCheng Mountain - QingCheng Shan en chino para los que vayáis. Y la tal amiga de Beibei, resulta que es una asidua a esa montaña, no por que le guste hacer senderismo en sus ratos libres, sino porque desde pequeña va allí con su padre, un reputado lo-que-sea de la religión Taoista. La montaña QingCheng es en realidad una "montaña taoista", en el sentido de que está plagada de montasterios taoistas, y todo lo que se recauda en la entrada (si, las montañas tienen "entrada"), en los restaurantes, tiendas de recuerdos, etc. sirve para mantener a los monjes y "monjas" del lugar.

No entiendo mucho de religiones-filosofías chinas, pero el rollito taoista tiene muy buena pinta, la verdad. Viven semi-recluidos en sus monasterios, y aunque no puedan tener hijos, se pueden convertir en monje tanto hombres como mujeres (las "monjas"), y por lo que pude comprobar son bastante pro-tecnología. Los que vi por allí hablaban por el iPhone...

Y mi viaje fue el siguiente: quedé a las 8 de la mañana con Beibei en la uni, y cogimos un taxi hasta la estación de tren del norte. Como estábamos bastante habrientos, Beibei me llevó a un sitio a tomar un desayuno típico chino. Of course, olvídate del café con leche (gran aberración para ellos); podéis ver los "manjares" que tomamos:



Básicamente es arroz caldoso con verduras en vinagreta, una empanadilla de carne mu mu rica, y "sopa" dulce de noseque. Según ella, estaba demasiado dulce y no la tomó; in my opinion, eso tenía de dulce poquito, es más, era una especie de aguachirri con poco sabor. Pero me sentó bien, y la verdad es que es un desayuno bastante contundente.

A las 9 quedamos con su amiga Sharon (nombre que se auto-concedió porque le gustaba, 译之 es su nombre real - buscadlo en el Google Translator para la pronunciación!). Nos montamos en el tren y fuimos a QingCheng. El tren super moderno y muy rápido, les doy un 10. Llegamos en 1 horita, y de ahí cogimos un bus que nos llevó a la falda de la montaña. Por supuesto, teníamos la opción de los taxis piratas para ir allí en vez del bus, pero eran muy caros y un gran timo. Mejor coger el bus, que aunque sea otra "experiencia basada en el refrote", tampoco es para tanto. Y pude ver una pelea en toda regla entre dos ancianos para entrar... que total, para acabar apiñados igualmente...

La falda de la montaña es la siguiente:



Mola eh! Pues resulta que la "enchufada" de la amiga de Beibei consiguió que nos colaran gratis, y nos ahorramos unos cuantos yuanes. A partir de ahí subimos la montaña por un caminito de piedra como este:



El viaje duró unas 3 horas, en las cuales vimos varios monasterios, y en uno de ellos paramos a comer. Para ellas el precio de todo lo de allí era exagerado, pero para que os hagáis una idea, comida para 3 personas por unos 60 yuanes, 7 euros!!!! Ni os lo penséis, comed allí!

En la mitad del recorrido a la cima finalizamos nuestra andadura, `porque ya eran cerca de las 2 de la tarde y había que volver. Pero no nos fuimos sin antes visitar a un gran amigo de Sharon - bueno, de su padre- el monje barbudo taoista... menudo personaje! Sintiendolo mucho no puedo colgar fotos de este señor, porque era muy tímido y no quería, pero nos invitó a un te y estuvimos una media hora con el charlando. Y entonces llegó el MOMENTAZO DEL VIAJE! Se me quedó mirando un rato, y luego dijo que ADMIRABA MI BARBA! jajajaja! que bueno! El tema es que su barba era larga pero "irregular"; es decir, pegotes de barba aquí y allí, y claro, no lucía tanto, y supongo que mi pelusilla de 4 días era envidiable para el. Tal y como dice el anuncio:

Billete a Chengdu: 1000 €
Comida en Qing Cheng Shan:7 €
Que un monje taoista te diga que admira tu barba: no tiene precio!!!!

Y a continuación, unas cuantas fotos de la aventura:

En el tren de ida


Andamios en la montaña


Sandalias que se compró allí Sharon para subir la montaña

 Paisaje verde verde!

 Por supuesto, para los vagos hay opciones... en el medio hay un chino gordo!


My friends


El simbolo taoista por excelencia


My BFF BeiBei


Foto sacada POR MI de postal, eh!?



martes, 6 de septiembre de 2011

Pandas!

Yeeeepa gente!

Estos días he estado más liado y no he podido contar nada del viaje... pero esta entrada tenía ganas de escribirla!  

Para los que seáis de Madrid, supongo que sabréis que en el Zoo de la ciudad hay Osos Pandas, y todo el mundo sabe que los cede el gobierno chino como regalo a nueztro querido paiz. El tema es que esos pandas vienen nada más y nada menos que del Centro de Reproducción de Pandas de Chengdu, mi querida ciudad este verano. Para ampliar un poquito más la cultura popular de los lectores de este blog, comento que Sichuan es la región de China donde están las mayores reservas de Pandas en cautividad. De hecho, tienen el mayor centro de reproducción del mundo para esta especie. Y como no, yo tenía que ir a verlos, que majooooos!



El centro en si está a unos 20 minutos desde mi universidad (sur de Chengdu) en taxi. Cuesta unos 30 yuan llegar (3 euros y pico), y recomiendo totalmente ir así y no en autobús, que pude ser una odisea enterarse de donde cogerlo, horarios, etc... y total, por 3 eurillos! no seais ratas! La entrada al sitio creo que son unos 50-60 yuan (unos 6 euros)

El centro es una especie de zoo enorme, con muchísima vegetación, paseos rodeados de bosque de bambú, y un enorme lago dentro del parque. Además de pandas, hay otras especies como pandas rojos, y cisnes - que yo no llegué a ver...- pero vamos, 90% de pandas. Y molan muchísimo! Tienen todo dividido en áreas en las que juntan a osos de la misma edad: zona de incubadoras, pandas de 1 año, semi-adultos y adultos. 

IMPORTANTE: el centro abre a las 8:00, y es crucial estar allí a esa hora para poder verlos en condiciones. Los pandas son super delicados y no soportan bien el calor, ási que hacia las 10.00 o 10.30 los meten en edificios con aire acondicionado, en unas celdas bastante oscuras, y ya no mola sacarles las fotos. Básicamente si llegas pronto, los verás escalando árboles, comiendo bambú, revolcándose por el suelo, etc.  todo a unos 3 metros!

Panda en incubadora:


Panda de 1 año:
Pandas semi-adultos:


Panda Adulto (cuando ves a este ya entiendes por qué se llaman Pandas Gigantes):
 

Y el menos conocido pero igual de bonito Panda Rojo:


Estos son como una mezcla de panda y de zorro, más pequeños, y corren que se las pelan, así que no pude sacarles buenas fotos. Creo que existe la opción de por unos 50 euros sacarte una foto con los pandas, tocarlos, etc. Yo no lo hice, pero empiezo a pensar que debí hacerlo!

En el complejo también hay un edificio donde explica todas las formas de asistencia a la reproducción que utilizan con los pandas... incluyendo electro-estimulación genital, "masajes" unidos a la electro-estimulación genital... que cada uno saque sus propias conclusiones. En mi opinión, son unos animales muy bonitos que viven a papo rey, y cuyo único propósito es traer descendencia. De hecho hay algún dicho chino que compara a la gente vaga con los Pandas...

Para los visitantes, sabed que dentro del centro hay tiendas oficiales de recuerdos, pero justo a la salida, hacia las 11.00 se ponen un montón de puestos de recuerdos "no oficiales", pero que están genial. Y por un precio aproximadamente 5 veces más barato, merece la pena!  Y la comida dentro es muy cara, siempre en los estándares chinos... pero por si vais "de paso" por Chengdu y vuestro presupuesto es ajustado, tenedlo en cuenta y llevaros comida de fuera.

Hoy he oido en la radio que las crias de Panda del Zoo de Madrid han cumplido 1 año, tengo que ir!

miércoles, 31 de agosto de 2011

Buda Gigante de Leshan


En mi segundo fin de semana, en vez de salir de juerga, decidí hacer un poco de turisteo por los alrededores de Chengdu. En esta entrada hablaré de mi mini-viaje a Leshan, un pueblo de cerca de Chengdu, a hora y media en bus.

A las 9 de la mañana me presenté en la estación de autobús Xinnanmen (un pelín al sur del centro de la ciudad), solo, y con muchas ganas de coger un bus en china (cada cosa que hacía era una experiencia!). En la entrada de la estación hay un panel muy grande con todos los destinos a los que se puede llegar con los autobuses, y ahí estaba el mío, Leshan, o más concretamente, el Buda Gigante de Leshan. Tras esperar unos 10 minutos de cola, conseguí mi ticket, luego pasé por los detectores – seguridad ante todo!- esperé otra cola para entrar en el bus, y me monté. Primera impresión: un autobús normal, ni muy viejo ni muy nuevo, aire acondicionado, televisión a bordo, vamos, bastante bien.

El camino a Leshan fue muy cómodo, paisaje muy muy verde y pueblos chiquitillos por el caminio. En la tele del bus pusieron un megadocumental de hora y pico sobre una cantante muy famosa, ya fallecida, china - Deng Lijun(邓丽君) – que debe ser como una Lola flores en España, pero de musica pop. Para los que aprendáis chino, una amiga me dijo que la tipa Deng Lijun tiene canciones muy fáciles de entender, y que esta genial escucharla para aprender.

A la llegada a Leshan, nada más bajar del bus había un hombre que nos invitaba a montarnos en otro autobús local para ir a ver el Buda Gigante. En este punto, para los posibles visitantes a Leshan, es conveniente saber lo siguiente: El buda puedes verlo de dos formas: subir la montaña andando y aguantar las colas que se forman por las escalinatas, o coger un barquito que va por el río y se detiene un rato en frente de la estatua, donde puedes sacar las fotos que quieras. La primera opción, si no hace mucho calor, y estás dispuesto a  rozarte con muchos chinos mientras subes incontables escaleras, que se saquen fotos contigo, etc. esta bien. Y podrás sacar fotos muy chulas, además de poder ver de cerca todo el “complejo”, y al propio Buda. La segunda opción es mucho más cómoda, pero digamos que es más de “turistas japoneses”. Alguien en Chengdu me explicó este término de “turistas japoneses”, que son los turistas que llegan, sacan la foto, y se van. Cada uno que elija lo que le venga mejor, yo fui en el barco porque hacía muchísimo calor, y me dolía mucho el pie. Pero unos amigos fueron por la montaña, y vieron muchas cosas que yo no pude ver. Eso si, si tuviesen que repetir irían en el barco sin dudarlo. Y si tienes mucho tiempo, y te da igual gastarte el dinero (creo que hacer las dos cosas te sale por unos 15 euros, y cada uno por separado unos 7-8 euros), pues adelante!

Volviendo al autobús: yo me monté en el autobús local (muy muy cochambroso), que por 1 yuan te lleva hasta la zona de la ciudad donde está el Buda. Como no entendía ni papa de lo que decía nadie, ese bus me llevó hasta la Opción A (la de subir la montaña), y cuando por fin entendí que desde allí se tenía que ir por la montaña, busqué un taxi que por 5 yuan (50 cents) me llevó a la entrada para coger el barquito. No tengo ni idea de cómo llegar directamente a esa entrada nada más bajar del autobús de Chengdu… Al lado de la entrada hay muchos puestecillos de recuerdos, y recomiendo comprarse las pulseras de bolas de madera con una mini-tablilla con 3 caracteres. No se que pone, pero me comentaron que era lo típico que se compraba en Leshan. Y no paguéis más de 6 yuan! (regatear, os dirán que cuestan 10). Ah, y ya me contaréis si también os hacian oler las pulseras para que comprobéis que son de madera de verdad, jeje.

Al lado de la entrada conocí a una pareja de españoles super majos, y fuimos los 3 en el mismo barco. Sacamos un montón de fotos, echad un vistazo a estas pocas:

Después pillamos un taxi, que nos llevó de vuelta a la estación de autobús, y cerca de allí comimos antes de montarnos. Rico rico, como siempre en China! Compramos los billetes de vuelta (creo que no se pueden comprar billetes de ida-y-vuelta desde Chengdu, hay que comprarlos por separado en cada estación), y yo me fui a Chengdu; ellos a la montaña Emei-Shan, a otra hora y pico de Leshan.





Recomendación: Id a ver el Buda, merece muchísimo la pena y es impresionante, te hace pensar como leches habrán escarbado la montaña para hacer el Buda. Y en mi opinión les quedó hasta guapo el chaval! Aproximadamente una uña del pie del buda es del tamaño de una persona… flipante!

PD: y hablando de Buda, os recomiendo ver una película china, ganadora del premio de cine de Casa Asia de este año, ambientada en Chengdu tras el terremoto de 2008, “Buddha Mountain”. Es muy “china”, pero me encantó.